Comida chatarra: El cáncer que habita en las escuelas de Coahuila
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En planteles educativos y fuera de ellos se siguen vendiendo estos alimentos; padres tampoco hacen la tarea
Por: Sandra Naal
Fotos: Orlando Sifuentes
La comida chatarra sigue estando muy puntual en planteles educativos, donde alimentos que no son sanos continúan dentro y fuera de las instituciones pese a que está prohibido; lo anterior se pudo comprobar por un recorrido hecho por VANGUARDIA.
La Secretaría de Educación y la Secretaría de Salud se habían comprometido a regular la situación, pero al parecer no ha sido suficiente ya que los pequeños siguen ingiriendo en su mayoría frituras, refrescos y dulces.
En algunas primarias de la colonia Zaragoza, en la hora de receso los menores estaban consumiendo frituras, bebidas azucaradas como jugos y refrescos; también en planteles de la colonia Morelos se presentó la misma situación, los alumnos no estaban ingiriendo alimentos nutritivos.
A la hora de salida los vendedores ambulantes también se hicieron presentes y fuera de la primaria Anexa y la Secundaria Federico Berrueto Ramón, en pleno centro de la ciudad, los niños compraron frituras y refrescos; cabe mencionar que los padres de familia tampoco están haciendo su trabajo y permiten que los infantes consuman comida chatarra.
Además afuera de estas instituciones educativas había vendedores ambulantes con frituras y dulces, esto es lo que la mayoría de los niños compra a la salida de la escuela, además de casas donde se ponen puestos con este tipo de productos.
Según se había acordado, las escuelas que continuaran permitiendo la venta de comida chatarra serían sancionadas con hasta 5 mil salarios mínimos, cerca de 365 mil pesos, según lo establecido por la Secretaría de Educación y la Secretaría de Salud a nivel federal.
Anteriormente el secretario de Salud de Coahuila, Jorge Verástegui, pidió comprensión de los padres de familia para poder combatir la venta de comida chatarra en las escuelas.
Dijo que a pesar de que la vigilancia persiste en centros educativos, desde el año pasado se detectó a madres de familia que llegaban a las escuelas y por las rejas pasaban la comida a sus hijos.
SOBREPESO A LA BAJA
Pese a lo anterior, según los resultados de la Encuesta Escolar de Hábitos 2016, cuyos resultados se dieron a conocer recientemente, en el tema de sobrepeso y obesidad se obtuvo una reducción y ahora ya no son 3 de cada 10 niños, sino 2 de cada 10 los que padecen una u otra enfermedad.
La Ensanut 2012 (Encuesta Nacional de Salud y Nutrición) ubica a Coahuila en el rango de edad de 5 a 11 años con un porcentaje de obesidad de 18.4 por ciento, el cual luego de esta encuesta disminuyó en un 3.7 puntos porcentuales.
Para la suma de sobrepreso y obesidad, Ensanut ubica al estado con un porcentaje de 38 por ciento para ese mismo rango de edad; los resultados del ejercicio ahora lo colocan con un 32.5 por ciento.
En el rango de edad de 12 a 19 años, se estima que en el estado había 16.7 por ciento de casos de obesidad, y ahora hay 14.6 por ciento.
Se encuestó a 622 mil 546 alumnos de Educación Básica, y un 90 por ciento contestó el cuestionario.
Con la comida chatarra...profesores ponen el mal ejemplo
el mal ejemploLos docentes también ingieren alimentos chatarra y dan mal ejemplo a los niños, pero que ellos suelen tomar refrescos “light” porque consideran que así es menos dañino, señalaron encargadas de estanquillos y cafeterías de escuelas.
Las trabajadoras, quienes hablaron de manera anónima ya que no quieren que se les retire su permiso de venta en las instituciones educativas, señalaron que se sigue vendiendo comida chatarra en los planteles y que no se les ha prohibido vender frituras, refrescos o comida con grasa.
Señalaron que de alimentos preparados siguen vendiendo gorditas de harina y los rellenos van desde queso hasta chicharrón prensado, ya que en ningún momento se les dijo que la comida grasosa ya no puede venderse dentro de las escuelas.
También comentaron que sigue la venta de variedad de frituras a las que además se les añade salsa picante y crema.
En cuanto a la venta de bebidas, continúan con la distribución de refrescos y jugos que contienen gran cantidad de azúcar y casi no venden agua natural embotellada.
Cuando han tratado de vender fruta está casi no tiene demanda pues los niños prefieren las frituras y un refresco.
