Flor Silvestre/Una Cita de Amor
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Mañana se cumplen 113 años del natalicio del cineasta coahuilense Emilio “Indio” Fernández nacido el 26 de marzo de 1904 en el Mineral El Hondo de la Región Carbonífera de nuestro estado.
Hijo, según palabras suyas, de un general revolucionario y una india kikapú, es comprensible el por qué los temas que más le apasionaron a lo largo de su filmografía fueron por un lado los relacionados a la gesta revolucionaria que todavía sigue teniendo hondas ramificaciones en nuestro tejido social contemporáneo, así como un nacionalismo apasionado que se enmarcaba en el amor a nuestra tierra y a la figura materna y femenina, que era totalmente decisiva en la mayor parte de sus historias.
Es por ello que aprovechando este aniversario hoy vamos a recomendar un par de sus películas, la primera de ellas disponible para la venta en formato de DVD en las mismas instalaciones de este medio, en la mera esquina del Bulevar Venustiano Carranza y Chiapas, y la segunda a transmitirse la tarde de mañana en punto de las 14:30 horas por la señal del Canal 22 Nacional en ocasión del mencionado natalicio del célebre cineasta:
“FLOR SILVESTRE” (1943)
La primera gran película de “El Indio” nos remonta a los albores de la Revolución Mexicana cuando José Luis (Pedro Armendáriz) y Esperanza (Dolores del Río), unen sus vidas a sabiendas de que van a enfrentar una serie de problemas debido a su diferencia de clases dado que José Luis es hijo de un hacendado llamado Don Francisco (Miguel Ángel Ferriz), quien es el principal opositor de la unión de su hijo con una mujer de clase humilde pero al morir en medio del alzamiento de los campesinos ante el llamado a las armas provoca el odio en José Luis por los revolucionarios y una insaciable sed de venganza que tendrá consecuencias fatales para él y su bella “flor silvestre”.
La cinta es considerada como su primera gran película porque fue la primera que unió a un equipo de talentosos creativos delante y detrás de las cámaras que nunca se ha vuelto a reunir en el cine nacional empezando por Dolores del Río en su “segundo aire” como actriz de cine pisando las cuatro décadas de vida y tras haber sido de las divas pioneras de la Meca del Cine en su etapa silente; Pedro Armendáriz como actor fetiche del realizador un par de años después de actuar en la ópera prima de “El Indio”, “La Isla de la Pasión”, de 1941; Gabriel Figueroa, formado en medio de la técnica fotográfica de maestros hollywoodenses como Gregg Toland (“El Ciudadano Kane”) y los muralistas mexicanos; el zacatecano Mauricio Magdaleno como guionista y “El Indio” en la silla del director.
“UNA CITA DE AMOR” (1958)
La última película que marcó la colaboración de “El Indio” Fernández como director y Gabriel Figueroa como su fotógrafo de cabecera lo reunió por primera y única vez en su caso con la diva aún viviente del cine nacional, Silvia Pinal, en el papel de Soledad, hija del rico Mariano (Carlos López Moctezuma) quien se entrega amorosa al huérfano Román (Jaime Fernández) dueño de un pequeño rancho, Bramadero, junto a Bellavista, la hacienda del padre de ella. Mariano odia a Román y quiere casar a Soledad con el rico Ernesto (Guillermo Cramer), de quien fue novia tiempo atrás. Román decide irse para ganar el dinero que le permita vencer la resistencia de Mariano. Guión del mencionado Mauricio Magdaleno basado en la novela “El Niño de la Bola” de Pedro Antonio de Alarcón.
Comentarios a: alfredogalindo@hotmail.com; Twitter:
@AlfredoGalindo